A sus 77 años falleció el médico urólogo y director de la Danza Garabato Del Norte, Leopoldo Klee Palacio, su nombre es sinónimo de entrega, pasión, dedicación y amor por su profesión y el Carnaval.
Leopoldo fue un guerrero de la vida, siempre el caporal de su danza y de una sensibilidad humana con sus pacientes. Padre de dos hijos Manfred y Paul, hermano del querido comunicador Jorge Humberto Klee.
Era considerado uno de “los cancamanes” del Carnaval de Barranquilla. Fue el primer Garabato en llegar a tener la dignidad de Rey Momo en el Carnaval de Barranquilla en 2003, presidió las festividades con Margarita Lora Gerlein, celebraron los 100 años de la Batalla de Flores y la declaratoria de la Unesco al Carnaval de Barranquilla como Patrimonio de la Humanidad.
Su pasión por el Carnaval era tan fuerte, en 1987 perteneció a la danza Cipote Vaina, posteriormente en 1991 pasó por Cipote Garabato, y en 1993 fue fundador del Garabato del Norte, junto con un grupo de amigos César Cuartas y Emilia Calderón, siempre fue su director y Caporal. Ganadores de cinco Congos de Oro en los últimos 11 años. Destacada por sus desfiles en la vía 40, en la calle 84 y carrera 44. Su legado ha perpetuado en su familia y sus hijos que hacen parte de la danza.
Con el Garabato del Norte recorrió las principales Fiestas del país, la Feria de las Flores en Medellín, en el Festival de Folclor en Neiva, del Café en Calarcá, Desfile de la Fundación Solidaridad por Colombia en Bogotá, Fiestas de la Cosecha en Pereira y de la Ganadería en Montería.
Actualmente presidia la Fundación de Reyes Momos del Carnaval de Barranquilla y miembro de Fundegarabato que reúne a las danzas de esta expresión, también directivo en Fayfa.
“No tengo edad, tengo vida para bailarlo y cabeza, manos corazón y sobretodo humanidad para atender y mitigar las afecciones de la gente: hombre, mujer, joven o mayor hasta que el de arriba lo ordene”, fue su último mensaje en las redes sociales de su grupo.
Durante más de tres décadas, Leopoldo hizo parte activa de la Fiesta, cambiando su bata blanca de médico por la capa de Garabato. Esa era su verdadera vocación, trabajó incansablemente por mantener la tradición viva y cada año se preparaba junto a su grupo para desfilar con amor en el Carnaval de Barranquilla durante cada desfile en la vía 40.
Su legado quedará por siempre vivo en los corazones de miles de carnavaleros, barranquilleros y garabateros.
Carnaval de Barranquilla, lamenta profundamente su partida, abraza a su familia, amigos y miembros de la Danza Garabato Del Norte. Paz en la tumba de un urólogo con alma de Garabato.
